De vuelta al ruedo con todo, me resisto a la rutina y siempre me las apaño para renovar ciertos hábitos. Por esta razón, me apetecía cambiar algo en el blog y los tres siguientes post estarán dedicados y más centrados en personas y no tanto en proyectos. A todas ellas las conocí en el último curso de Emprendimiento Social que hice en Almería este verano. Personas con un alma diferente y especial que me transmitieron mucho con tan solo observarlas. Me han sorprendido por lo que son sin más. En muchas ocasiones somos conocidos y reconocidos por lo que hacemos y ¿si nos apreciamos más por lo que somos?, quizá nos sentiríamos más tranquilos en la vida y veríamos que a lo mejor no hay tanto que hacer sino ser y dejarnos “dejar” –¡me gusta esta expresión!–.

Raquel Cárcamo.

Charlar con ella me resultó mágico. Curiosamente mientras yo le hablaba parecía que no me hacía caso y sin embargo cuando me contestaba me di cuenta que estaba super presente, no me miraba pero si hacia una escucha activa de verdad. Distintas maneras de comunicarnos son posibles, con ella me sentí mucho más escuchada que con otros que me miran pero no están, ¡ay, qué gusto Raquel contigo!

Consciente de sus dificultades me decía: “claro, las personas que tenemos una discapacidad intelectual, necesitamos el acceso a la lectura fácil”. Increíble, ¿no? Os imagináis que alguien os dijera que tiene una dificultad con los números y que necesita siempre a alguien que le haga los presupuestos. Si fuéramos más transparentes y aceptáramos con más normalidad nuestras dificultades habría entre todos una comunicación más sincera.

Raquel tiene buena energía, esa que te deja con muy buen rollo el resto del día. Me pareció natural, sabia, honesta, alegre y generosa.

Cooperativista y presidenta de “Altavoz, miradas que aportan valor”, una bonita iniciativa, primera cooperativa formada al completo por personas con discapacidad intelectual que trabajan para dar más autonomía a todas las personas. Entre los servicios que prestan están:

Evaluar productos, espacios y servicios para que sean accesibles cognitivamente.
Adaptar los textos al método de lectura fácil, para personas con dificultad de comprensión lectora y “no tanto”.

Tienen mucho trabajo porque lo que hacen es muy necesario y realmente pueden evaluarlo muy bien ya que su visión está menos contaminada que la del resto que vamos muchas veces con orejeras por el mundo. ¿Cuantos textos legales o programas electorales son ilegibles para cualquiera de nosotros? Altavoz los adaptan para que no generen confusiones y para hacer la información fácil de entender y comprender. Y si generas un documento informativo ¿por qué no hacer solo uno en lugar de dos, si el de lectura fácil lo entiende todo el mundo?

Raquel empezó esta actividad en una organización y viendo su carácter emprendedor y autónomo, le dieron todos los apoyos necesarios para lanzarse a montar la cooperativa. En un país, donde el cuidado de las personas con alguna discapacidad, pasa de sobre proteger a abandonar como en un péndulo, ella nos enseña que el camino es ir poco a poco y que puedes ir acompañada hasta que estas lista y decides saltar tu sola. Seguramente Raquel tiene un carácter muy positivo y eso le facilita lo que esta haciendo, pero todos tenemos muchos aspectos en los que dar un salto y millones de razones para hacerlo. Para mi Raquel por lo que es, estando tal cual es, para mi es un modelo a seguir.

¡Mi gran sorpresa: conocer a Raquel Cárcamo!